Es una de las modalidades de caza más practicadas en Europa y una de las más sociales.
La batida no consiste en un gran rastreo de perros sabuesos como los que se pueden realizar en las montañas cubiertas de sotobosque o en los carrascales llenos de maleza.
En una batida, llamada también "gancho" no intervienen perros, sino solo una línea de ojeadores. La batida consiste en ojeos en el monte o en el bosque, cuartel por cuartel, si es necesario con la ayuda de perros de pequeño tamaño, muy valerosos y mordedores, como los teckels o os fox y jagd-terriers.
Otras ventajas de este tipo de perros jabalineros son que los rastreos no son ni muy largos ni muy rápidos, y que los animales organizados permanecen agrupados y respetan la estructura social de la piara al pasar por la línea, lo que favorece un disparo selectivo y evita errores. Una piara que no es acosada cruz un lindero o un sendero siguiendo un cierto orden jerárquico: el primer animal que se avista suele ser la jabalina dominante, a la que no se debe disparar.
Para que una batida tenga éxito se requiere una organización rigurosa.
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